Las nuevas tecnologías se abren paso en las residencias de mayores. Las más pioneras, ya antes de la pandemia, comenzaron su transformación digital, pero ha sido esta, la que ha agilizado la necesidad de un gran cambio.
Los retos del envejecimiento han llevado a las residencias a encontrar nuevas formas de innovación. Han surgido modelos de cuidados novedosos y el concepto de residencia tal y como lo conocíamos, se ha actualizado.
Los centros residenciales han pasado a ser hogares donde la atención y el bienestar del usuario es el motor de la actividad diaria.
¿Para qué existe la tecnología si no es para mejorar y optimizar el trabajo, los cuidados y en definitiva, el bienestar de los mayores en las residencias?
La tecnología en residencias mejora la calidad asistencial
A día de hoy, la tecnología se ha convertido en un integrante fundamental para las residencias. Muchas son las innovaciones que han pasado a formar parte del día a día de estos centros.
Pero no sólo hablamos de las innumerables mejoras que provoca en el residente, el equipo profesional también se beneficia. La optimización de las tareas es mayor, lo que da lugar a un aumento del tiempo disponible para cuidar mejor y además, una disminución de costes.
Invertir recursos en tecnología es un elemento diferenciador para los centros que quieren ofrecer la mayor calidad asistencial.
Transformación digital y tecnologías para residencias
El sector se enfrenta a una época de cambios: la esperanza de vida se encuentra en su máximo histórico y a su vez surgen nuevas corrientes de cuidados y modelos de atención. ¿Cómo ayuda la tecnología a afrontar esta transformación?
Por un lado, se adapta a las necesidades de los residentes y por otro, digitaliza los procesos.
El mejor ejemplo de ello es el sistema integral de digitalización SIDI BLED, que como su propio nombre indica, digitaliza el centro residencial, el trabajo y los cuidados.
SIDI BLED es el eje de todos los procesos que se llevan a cabo alrededor del residente. Instalado en la propia habitación, combina el sistema de llamada, la recogida de datos en tiempo real, y la gestión de procesos integrada dentro del software asistencial, junto con otros productos como los sensores de cama o silla. Además, su diseño dota a la habitación de un aspecto moderno y tecnológico.
Por otro lado, los sensores de cama y silla, avisan de posibles caídas o levantamientos, que pueden llegar a producir situaciones de riesgo y están especialmente diseñados para cuidar sin sujeciones manteniendo la autonomía e integridad de los usuarios.
Se instalan debajo del colchón de la cama o silla de cada usuario, por lo que son imperceptibles. Existen tanto cableados como inalámbricos, dependiendo de las necesidades de tu centro.
La posibilidad de integración de los sensores con el sistema asistencial proporciona al personal un plus, ya que se integran en los mismos dispositivos móviles de aviso que el sistema asistencial, como smartphones o relojes.
La combinación perfecta se dá cuando el sensor es un accesorio de la cama cota cero. ¿Por qué? Por que esta cama es la más segura del mercado en residentes que tengan problemas cognitivos y sean propensos a sufrir caídas.
Solo 6 centímetros separan a la cama cota cero del suelo, por lo que si un usuario se cae, no va a producirse ningún daño. Dotada con 4 planos y motor eléctrico, los cuidados diarios de higiene o ingestas, se vuelven más sencillos.
Una apuesta segura para la Atención Centrada en la Persona (ACP), que ya se ha instalado en centros como Grupo Mimara o San Camilo, entre otros.
Otra parte muy importante a tener en cuenta donde la tecnología juega un papel importante, es el control de accesos y de errantes. De esta forma, podemos controlar entradas y salidas evitando fugas, restringir áreas concretas para mayor seguridad, y eliminar permanentemente las llaves.
Tras la COVID19 y las nuevas olas que se van sucediendo, la toma de constantes diaria resulta vital para detectar posibles problemas de salud.
El monitor de constantes vitales o multiparamétrico, es la herramienta ideal para controlar y medir, de forma precisa y en menos de 15 segundos, datos como la presión arterial, la saturación de oxígeno o la temperatura.
La gran ventaja de esta solución es que genera informes que se integran con el sistema asistencial para la gestión de los datos ayudando a localizar signos de deterioro temprano.
Contar con un sistema de lavandería es cada vez más importante en los centros residenciales. Conocer el ciclo de la prenda desde que sale de la habitación, pasa por el proceso de lavado, se clasifica y posteriormente se vuelva a colocar en la habitación es esencial para evitar las pérdidas o extravíos.
Las prendas a menudo, tienen un valor emocional y los extravíos producen frustación y pérdida de confianza en los residentes y familiares. Implantando la tecnología RFID de trazabilidad textil, favoreces el control de las prendas, la regulación del inventario y el ahorro de los costes.
Estas son algunas de las tecnologías para residencias de las que se puede beneficiar tu centro, dotándolo de las más avanzadas soluciones para la digitalización. Puedes encontrar más sistemas en los apartados sociosanitario, sanitario y seguridad de la web.
Las nuevas tecnologías se han hecho un hueco en las residencias y están contribuyendo de forma muy satisfactoria al bienestar de los usuarios y a su atención cada vez más personalizada. Los nuevos sistemas forman parte del día a día, proporcionando el valor tecnológico que hace que las personas quieran vivir en ellas.